La pérdida auditiva resulta de la incapacidad de nuestro sistema auditivo para captar ciertos estímulos sonoros, y crea un obstáculo para la comunicación. Aunque es sobre todo un déficit que se atribuye a los individuos de más de 55 años, la pérdida auditiva puede darse también en gente más joven e incluso en los más pequeños.
En cuanto a los grados que existen de esta afección del oído podemos encontrar varios diagnóstico: desde una pérdida auditiva muy leve, pasando por la moderada y la severa y hasta llegar a la profunda, cuando dejamos de percibir cualquier sonido.
¿CÓMO SABES SI SUFRES PÉRDIDA DE AUDICIÓN?
Si te has encontrado en alguna de las siguientes situaciones sería recomendable que realizaras una revisión de tu oído.
▪️Te cuesta entender lo que otros hablan o te parece que susurran.
▪️Muchas veces pides que te repitan lo que te han dicho.
▪️Necesitas subir la televisión o la radio más de lo que otros consideran normal.
▪️Te sientes inseguro en la calle porque no escuchas los coches que se acercan.
▪️Has dejado de realizar algunas actividades que te gustan porque no puedes disfrutar de los sonidos.
▪️No comprendes conversaciones en ambientes ruidosos como, por ejemplo, los bares.
▪️En ocasiones no percibes que llaman a la puerta o por teléfono.