¿Fiebre del heno?

La fiebre del heno, también llamada rinitis alérgica, causa signos y síntomas parecidos al resfrío, como secreción nasal, picazón en los ojos, congestión, estornudos y presión en los senos nasales.

No obstante, a diferencia de un resfriado, la fiebre del heno no se produce por un virus.

La fiebre del heno se produce por una respuesta alérgica a los alérgenos en interiores o al aire libre, como el polen, los ácaros del polvo o pequeñas manchas de piel y saliva que arrojan los gatos, perros y otros animales con pelo o plumas (caspa de mascotas).

Los signos y los síntomas de la fiebre del heno pueden incluir:

➡️Goteo nasal y congestión nasal.
➡️Ojos llorosos, rojos y que causan picazón (conjuntivitis alérgica)
➡️Estornudos.
➡️Tos.
➡️Picazón en la nariz, el paladar o la garganta.
➡️Piel hinchada y de color azul debajo de los ojos (ojos morados alérgicos)
➡️Goteo posnasal.
➡️Fatiga.

Los signos y síntomas de la rinitis alérgica pueden comenzar o empeorar en un momento particular del año. Los detonantes son los siguientes:

☑️El polen de los árboles, que es frecuente a principios de la primavera.
☑️El polen del césped, que es frecuente a fines de la primavera y en verano.
☑️El polen de la ambrosía, que es frecuente en otoño.
☑️Los ácaros del polvo, las cucarachas y la caspa de las mascotas pueden estar presentes todo el año (perenne). Los síntomas de los alérgenos de interiores pueden empeorar en invierno, cuando las casas están cerradas.
☑️Los rastros de hongos y moho del interior y del exterior se consideran estacionales y perennes.

Si tienes alguna duda o necesitas ayuda ¡contáctanos!